¡ Vaya temporadita que viene arrastrando el PSOE !; plagada de insensatas ocurrencias, desplantes y espantadas difíciles de explicar y justificar, mendaces voces que van por libre, y desavenencias internas.
Insensata ha sido la propuesta, esta vez a iniciativa suya, de exhumar y sacar del Valle de los Caídos los restos de Franco; pretendiendo zarandear a quien lleva treinta y ocho años muerto, cuando en vida no se atrevían a sostenerle la mirada. Con el revolver de la sepultura, parece que se quiera enterrar el espíritu de concordia y reconciliación que rigió en el periodo de la transición a la democracia; y que Felipe González, primer presidente de un gobierno socialista en la misma, quiso y supo mantener.
Desplante a las víctimas del terrorismo, por no sumarse a la concentración del pasado domingo en Madrid, en la que se reclamaba Justicia. Debieron asistir, aunque solo fuera por los muchos socialistas asesinados por ETA. El riesgo de ser abucheados por un reducido número de congregados, como ocurrió con algunos representantes del PP, es el precio a pagar cuando la indignación grita contra la injusticia.
Espantada, la protagonizada por sus concejales en Tafalla( Navarra), ciudad natal de la terrorista asesina Inés del Río, al ausentarse del salón de plenos de dicha localidad para no participar en la votación de la moción, presentada por UPN, de "condena y repulsa" ante el "inhumano currículum" de la etarra. La moción fue aprobada con los votos a favor, en solitario, de UPN. BILDU e Iniciativa por Tafalla, también se ausentaron; pero la desconcertante sorpresa corrió a cargo de los ediles socialistas tafalleses, cuya postura respaldó su líder navarro.
Mendaz y vil fue el secretario general del PSOE cordobés, Juan Pablo Durán, quien molesto con las investigaciones en marcha por las corrupciones, en las que presuntamente aparecen involucrados algunos de sus compañeros de partido, ha dado rienda suelta a su enfado con barbaridades, tales como: " La derecha ni hace prisioneros ni deja heridos. Solamente saben matar y, si es posible en las cunetas, que es donde siempre nos han dejado a los socialistas"; agregando en su oratoria a base de dislates, en la reunión de la ejecutiva local del partido en Peñarroya-Pueblonuevo, y refiriéndose al PP: " No sabe convencer, solo vencer y si no lo hacen por la fuerza de las armas, ahora utilizan las fuerzas de las plumas estilográficas de los juzgados o de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado". Incomprensiblemente, esta voz malaje sigue en el partido.
Desavenencias varias, visibles y soterradas. Una de ellas, sobre " el derecho a decidir" impulsado por los nacionalistas catalanes. En la reciente votación en el Congreso acerca de este asunto, finalmente negaron el esgrimido y unilateral derecho (diciéndose que hubo presiones o recomendaciones por el medio); por cuanto tal derecho corresponde a todo el pueblo español y no solo a Cataluña, conforme establece la Constitución en relación a la soberanía nacional y por los procedimientos legalmente regulados. No obstante, sus " hermanos" socialistas catalanes del PSC, rompiendo la disciplina, se abstuvieron.
Un partido de ámbito nacional, que ha gobernado en España durante años y que, legítimamente, pretende volver a conducir el gobierno de la Nación, no puede permitirse tal desbarajuste, ni que en él se produzcan tantas incongruencias ni despropósitos. Algunos destacados militantes de la vieja guardia han dado repetidos toques de atención; su criterio se escucha y pesa en las bases.
El guante está en el tejado de Pérez Rubalcaba. O resuelve la desnortada deriva de su partido, empezando por enmendar sus propios errores, o le harán volver a la cátedra. Por si acaso, no estaría demás que empezara con el reciclaje, poniendo sus conocimientos de química al día.
