Ahondan en la discordia
y polarizan la sociedad,
los que la dividen en dos,
barriendo a su favor:
los demócratas progresistas de boquilla,
hipócritas consumados, señalando,
en un “ totum revolutum “,
a la “ extrema derecha “- PP y VOX -
como el mal social a extirpar
y un cáncer para la convivencia en paz.
Cínica y falsamente lo afirman y difunden,
cuando son ellos los que no hacen ascos,
para cogobernar con la extrema izquierda
y pactar con la anti-española política escoria.
Igual les da cuatro que cuarenta,
con tal de la Nación gobernar.
A la vista está su ínfima condición patriótica y moral.
El PP debe desprenderse del complejo
de la “ derechita cobarde “, acuñado por VOX,
que sigue en sus trece con la descalificación.
Ambos precisan remar al unísono,
“ tirar pelillos a la mar “ y conjuntar fuerzas.
Lo saben y así se les dice, pero se topa
con intereses personales, posiciones
numantinas e intransigencias.
No queda más que aguantar y armarnos de paciencia.
A este paso, mejores tiempos pueden tardar en llegar.
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