CATALUÑA: “ LO QUE NO PUEDE SER…”

 

Artur Mas y la ralea de independentistas que piensan y se pronuncian como él, en procesos mentales delirantes y palabrería de continuado enfrentamiento y de infundada exhibición victimista, no tienen remedio ni merecen condescendencia. Se han inventado la aberrante y falaz historia de la " nación catalana", que nunca fue, y han engañado y manipulado a muchos catalanes. Cataluña siempre fue y deberá seguir siendo una parte del todo que es España.

No importa el número de los que quieren la secesión, ni la invocación al inexistente y exclusivo " derecho a decidir" de los catalanes sobre las aspiraciones separatistas. La unidad de España, avalada por la verdadera Historia y respaldada jurídicamente por la Constitución es incuestionable e inamovible. El futuro de ella como única nación depende de la voluntad de todos los españoles. Sólo en el hipotético caso de que éstos optasen por el suicidio colectivo, se inclinarían por renunciar a Cataluña y que se desgajara del todo. Para que ello sucediera, harían falta traidores que estimulasen y encauzaran tal deseo.

El suicidio colectivo apuntado trae causa en que no se puede entender España sin todas las regiones- hoy autonomías- que la conforman y, por tanto, la sangría desgarradora acabaría con su secular razón de ser y existir; a veces a estacazos y dolorosos desencuentros, para terminar siguiendo unida.

El hacer cábalas en los medios- lo que viene repitiéndose con frecuencia- sobre los porcentajes electorales autonómicos, que le bastarían a Mas, o a algún sucedáneo de la misma camada, para declarar ilegalmente la independencia de Cataluña, es entrar en el juego secesionista. Hay que apelar sólo a la Historia y a la Ley, e insistir en el dicho siguiente: " lo que no puede ser, no puede ser, y además es imposible".