domingo, 29 de abril de 2018

CONTROVERTIDA SENTENCIA A LA “ MANADA “


Contra las sentencias judiciales que no satisfacen o adecúan a las pretensiones de las víctimas, los justiciables, las defensas, las acusaciones, la fiscalía o alguna de las partes, sólo caben los recursos procedentes y aceptar el pronunciamiento final sobre ellos. El respeto a la Justicia independiente, así como  la facultad de juzgar y, en su caso, resolver los recursos interpuestos, es un pilar fundamental del Estado de derecho.

Se puede disentir de los fallos judiciales y opinar sobre ellos en uno u otro sentido. Pero se deben rechazar y son inadmisibles los juicios paralelos y los tribunales populares, que tratan de imponer su criterio por motivaciones subjetivas, emocionales o ideológicas, máxime cuando se “ pone en la picota” a los juzgadores.

En el caso de la “ MANADA “ se ha producido una reacción generalizada- en las calles, redes y determinados medios-  de repulsa contra la sentencia, que excede con creces la legítima discrepancia, llegándose al extremo de pedirse la inhabilitación de los miembros del Tribunal sentenciador de la Audiencia de Pamplona.

Las manifestaciones de protesta por la polémica sentencia se están repitiendo por muchas ciudades de España, siendo el eslogan principal: “ Es violación, no abuso “, cuando la inmensa mayoría no ha leído la extensa sentencia ni tiene conocimientos jurídicos.

El Tribunal juzgador condenó a las cinco alimañas a nueve años de prisión por abuso sexual, al no apreciar violencia, intimidación o amenaza grave para estimar violación. Uno de los tres componentes del Tribunal hizo un voto discrepante en favor de la absolución. En cualquier caso, como era de esperar, se ha anunciado que el fiscal, las otras acusaciones y la defensa de los condenados van a interponer los correspondientes recursos: los primeros, pidiendo la condena por violación, y la última la absolución.

A la vista de las reacciones contra la mentada sentencia, un esfuerzo de serenidad e independencia tendrá que hacer el tribunal que resuelva los recursos, para no verse afectado o perturbado en este controvertido caso. Dejemos que la Justicia siga su recorrido. Al final del mismo dirá la última palabra.

viernes, 20 de abril de 2018

MONTORO EN SU BERENJENAL

El juez Llarena ha actuado con diligencia al requerir al ministro de Hacienda, Sr. Montoro, para que le informe de los datos objetivos que sustenten la afirmación de este, en una entrevista periodística, sobre que en la organización del 1-O no se había gastado dinero público, concretamente del Gobierno catalán. Petición lógica la del citado magistrado-juez instructor del TS, ya que, a su entender, la afirmación del ministro no concuerda o se contradice con lo que, al respecto, figura en la investigación.

Sorprendente y atrevido lo que dijo el ministro, máxime cuando se refirió a un asunto “ sub judice “. De ahí que el instructor considere oportuno contrastar lo manifestado por el ministro con lo que obra en autos, para poder valorar y estimar lo procedente acerca del presunto delito de malversación.

Queriendo o sin querer, el Sr. Montoro le ha echado un cable a los encausados. Al propio tiempo ha caído en una aproximación al oxímoron, al decir, por una parte, que no sabía cómo se sufragó el 1-O, para seguidamente afirmar que no fue con caudales públicos. Si no sabe cómo se pagó ello, ¿ cómo descarta que lo hizo la “Generalitat “? La casuística malversadora y defraudadora, como tantas veces se ha demostrado, se vale de argucias mil para intentar eludir los diversos controles e inspecciones legales.

Con independencia del resultado, Montoro se ha metido en un berenjenal innecesario, habiendo suscitado la duda en muchos de si “ se ha puesto la venda antes de la herida “. El debería saber todo lo que se cocinaba en su ministerio y en los caudales públicos catalanes, y lo importante que es callar en el momento oportuno, antes y después de la activación del Artº 155 de la Constitución.

martes, 17 de abril de 2018

UNA MÁS DE ADA COLAU

Algunos tildan a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de ser una ignorante en temas históricos, sobre todo por haber ordenado retirar el rótulo de la calle Almirante Cervera por ser un “ facha”, según ella, y sustituirlo por el dedicado al controvertido y provocador Pepe Rubianes, después de haber sido advertida de quién fue el famoso e ilustre marino, que falleció en 1909 antes de que surgiera el fascismo.

Sobre sus cuestionables o ignaros conocimientos históricos prevalece su sectarismo radical-populista y su conocido recorrido activista antisistema, amén de su fobia al estamento militar y a todo uniforme policial, así como a las esencias que caracterizan y conforman la nación española.

Su incompetencia sobre la gestión municipal y su falta de atención a las necesidades ciudadanas superan lo inimaginable. Nunca pudo ella llegar a más, ni Barcelona venir a menos con su primera edil. Punto y aparte es su coqueteo con el secesionismo catalán, que en ocasiones pretende disimular con posiciones equidistantes.

No es un hada deliciosa y benéfica, sino la bruja maléfica que, por desgracia, rige los destinos de la ciudad condal a su capricho. No obstante, Ada Colau ha conseguido colar su verborrea insidiosa y falaz, a falta de acciones constructivas, en bastantes barceloneses. A éstos les toca librarse del encantamiento y el delirio alucinógeno. Ellos verán lo que hacen. Avisados están.

lunes, 16 de abril de 2018

A PROPÓSITO DEL MÁSTER DE CRISTINA CIFUENTES

Al controvertido máster de Cristina Cifuentes se le viene dando un tratamiento desproporcionado en los medios y en las tertulias, con repercusión sobre la calidad, seriedad y transparencia de nuestras universidades que se cuestionan muchas veces con razón. En este caso afecta directamente a la RJC , pero se esparce un manto de sospecha sobre la credibilidad, solvencia e irregularidades en los títulos concedidos por algunas otras.

Parece evidente la no idoneidad docente de determinados profesores universitarios, así como la arbitrariedad para su designación y contratación. Según la opinión de catedráticos solventes, ya jubilados, que eran valorados y estimados como “ patas negras “ en su tiempo, el estimado jamón de jabugo ha ido cediendo espacio en los últimos años al “ york “, por mor de influencias e intromisiones políticas y amiguismos.

La contienda política explicaría el apresurado celo purista de la oposición, que ha aprovechado lo del máster de la actual Presidenta de la Comunidad de Madrid para pedir su dimisión o cese, a lo que esta se resiste de momento. Las iniciales explicaciones de Cristina Cifuentes parecieron convincentes, pero posteriores revelaciones le restaron credibilidad. Será la fiscalía quien determinará si en todo este enredo hay indicios de delito y, en su caso, cual y los supuestos responsables.

De lo publicado no parece que Cifuentes haya cometido falsedad, pero sí que ha podido mentir a sabiendas o imprudentemente. En cualquier caso, pese a la fama de ser una buena gobernante y persona honrada, muchos pronostican su pronto final político, bien sea por sugerencia o decisión de Rajoy, por el desgaste del fuego adversario o por la inquina que le tiene un sector de sus propias filas. También cabe la posibilidad de que ella dimita si, finalmente, es investigada- antigua imputación- judicialmente

En muchos países de nuestro entorno democrático se dimite o se cesa al político que falta a la verdad. En el nuestro, tradicionalmente viene siendo moneda corriente la mentira, así como las distintas varas de medir. A raíz del asunto que nos ocupa, se han destapado, como rama arrojadiza, diversos currículos falsos o inexactos de políticos de diferentes formaciones. Los más avispados se han apresurado a limpiar los suyos, pero les angustiará durante un tiempo por si ha quedado algún rastro suelto. Los más descarados e inquisidores se consideran por encima del bien y del mal, piden cuentas ajenas, pero se obstinan en no reconocer sus propias culpas, creyéndose titulares en exclusiva de su imaginaria superioridad ética o moral.

domingo, 15 de abril de 2018

NOTICIAS FALSAS ( “ FAKE NEWS “ )

Están de moda las noticias falsas, y si se utiliza la expresión inglesa “ Fake News “ para referirse a ellas, parece que se está más puesto al día. Difundidas por los diversos medios de comunicación y por las redes, corren como la pólvora, siendo a menudo difícil distinguirlas de las verdaderas. Detrás de cada noticia falsa existe la intención de intoxicar y desinformar por motivos diferentes. Lo decisivo y peligroso es que se tomen como ciertas y que causen mella en grandes sectores de la población crédula. De ahí la importancia de observar cierta cautela e intentar contrastar, dentro de lo posible, lo que se asevera, antes de coadyuvar a su propagación.

La misma prevención hay que tener respecto a determinados comunicados o anuncios oficiales y de organizaciones- nacionales, extranjeras o internacionales- que, por su especial temática son parciales, escondiendo o desfigurando otras veces la realidad. Hay hechos incontestables que están a la vista de todos, aunque cada cual los valore a su gusto.

Lejos quedan los años en los que el sereno del pueblo anunciaba , por la noche y a viva voz, la hora y el estado del tiempo sin equivocarse. Ahora toca creer, desconfiar o pasar de todo. A lo que no podemos escapar, aunque se intente disimular, es al dictado de la conciencia. Esta no suele engañar. En lo demás nos pueden dar gato por liebre, incluso a los que se creen más listos y mejor informados. Aunque hay también hechos incontestables que están a la vista de todos, si bien cada cual los valora a su gusto y preferencia. Tendremos que ir aprendiendo a saber discernir.

miércoles, 11 de abril de 2018

EL TRIBUNAL REGIONAL DE SCHLESWIG-HOLSTEIN Y PUIGDEMONT

No hace falta meterse en laberintos y controversias jurídicas para expresar disconformidad con la decisión del Tribunal regional alemán, que denegó la entrega de Puigdemont por rebelión y, a su vez, ha solicitado más concreción por la imputación de malversación de caudales públicos. Con tal decisión, susceptible de recurso, ha hecho un flaco servicio a la cooperación judicial europea, excediéndose en sus funciones y minando la confianza recíproca por la que aquélla se inspira.

En España rige el Estado de Derecho y, en este caso, será nuestro Tribunal Supremo el encargado de sentenciar, en su día, los presuntos delitos que se atribuyen a Puigdemont, absolviéndole o condenándole. Todo lo demás es marear la perdiz, entrometerse en terrenos ajenos y extralimitarse en la aplicación  del espíritu y la praxis de la Orden Europea de Detención y Entrega.

En fin, tras la elogiosa labor de información y policial española y alemana, la escrupulosa y larga instrucción del Juez Llarena, avalada por el fiscal teutón interviniente, ese Tribunal regional germano de Schleswig-Holstein, cuyo nombre nos es difícil de pronunciar, se ha despachado echándonos un jarro de agua fría. El órgano jurisdiccional competente debería enmendar la plana al mentado Tribunal. Si esto no fuera así, preferible sería que el fugitivo Puigdemont continuara en su voluntario “ exilio “, viviendo a cuerpo de rey.

Por cierto, ¿ quién paga sus gastos y la parafernalia que le acompaña ? Mentiroso, cobarde y traidor, le dijo al juez alemán que los gastos relacionados con el sedicioso 1-O los sufragaron aportaciones voluntarias anónimas. Además de cabellera frondosa, tiene mucha cara.

jueves, 5 de abril de 2018

¡ Dña. Letizia, Dña. Letizia…!

Doña Letizia, la Reina consorte , ha ido ganando puntos en popularidad y estima social, pese a las iniciales reservas y también algunas desaprobaciones que surgieron cuando se anunció su compromiso con el entonces Príncipe de España, que pasó después a reinar con el nombre de  Don Felipe VI. Pero las imágenes divulgadas sobre la oposición de Dña. Letizia para que su suegra, Doña Sofía, se fotografiara a solas con sus dos nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, finalizada la misa de Resurrección en la catedral de Palma de Mallorca, han traído cola, y no precisamente para bien de aquélla.

El protocolo de la Casa Real puede tener excepciones puntuales. Una de ellas, bien hubiera podido ser acceder a los deseos de Dña. Sofía, esa gran señora tan respetada y admirada por la inmensa mayoría del pueblo español, pero Dña. Letizia impuso criterio, causando con ello un generalizado rechazo y desconcierto. Una fotografía de la abuela con sus nietas, a nadie hubiera escandalizado, y hubiera sido aceptada con normalidad. Los desaires innecesarios no se contemplan ni en los más estrictos protocolos.

En el caso que nos ocupa, Dña. Letizia evidenció insensibilidad, descortesía, soberbia y autoritarismo. A una abuela no se le hace eso. Alguien, preferiblemente el Rey, debería explicarle a la niña princesa que tales actitudes son inadmisibles y, por tanto , no se deben imitar; máxime cuando está llamada a ser la futura Reina de España.