Qué cantidad de anatemas se han lanzado contra el Gobierno de coalición del PP y VOX, constituido en la Junta de Castilla y León, por parte del Ejecutivo “ sanchista “ y partidos que tanto tienen que callar y ocultar, sin que muestren el más mínimo recato en exhibir a sus aliados y conexiones con otras formaciones, que sí representan un peligro para la democracia y la convivencia en paz.
Ni el PP es angelical ni VOX el diablo; pero
ambos son democráticos y siguen la senda constitucional, aunque difieran en
puntuales planteamientos ideológicos, supeditados a la unidad de España y al
bien común. Los demonios del país han demostrado ya lo que son capaces de hacer; los tenemos y quieren
perdurar.
Esperemos que el citado Gobierno de coalición
acierte y funcione sin fisuras; que el PP abandone determinados complejos, que
VOX pondere algunos contenidos de sus discursos; que no haya reticencias o
repararos en fotografiarse juntos, y que se pueda extrapolar esta novedad,
cuando las circunstancias lo demanden o aconsejen, a los resultados de futuros
comicios electorales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario