A los pies del altar de ciertas capillas levantadas bajo diversas advocaciones a la Virgen María o de determinados santos y santas, se pueden ver escritos en hojas sueltas depositados en una cestilla o bandeja o plasmados en blocs, redactados por algunos de sus devotos visitantes, a quienes se les ve previa y/o posteriormente en actitud de elevar una plegaria. Cabe deducir que se escriben para dar las gracias por los favores recibidos o solicitados; para efectuar peticiones relativas la familia, la salud, la paz, sobre problemas de diversa índole personales y de allegados,...; y para expresar anhelos.
Las peticiones al Señor, la Virgen y los santos por escrito son un modo peculiar de manifestarse la devoción y la fe popular. En cualquier caso, sirven para reflexionar cuán necesitada está mucha gente de confiar sus cuitas y esperar unas ayudas diferentes a las terrenales. Sea por escrito, de palabra o en silencio, todas van dirigidas a lo Alto.
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