GALICIA ARDE

No hay calificativos para aplicarlos a los incendiarios malvados responsables de los incendios en Galicia. ¿Quiénes son y qué persiguen ? Se especula con cierto fundamento que, en principio, los incendiarios pudieron actuar concertados y conforme a un plan preconcebido; al menos en aquellos focos, distantes entre sí, que se iniciaron simultánea o sucesivamente. Las adversidades climatológicas contribuyeron a una realidad dantesca e infernal. Esperemos que una investigación meticulosa lo resuelva y que, después, el peso de la Justicia recaiga sobre ellos con el rigor máximo, haya habido o no concertación previa.

Ahora se está a la espera de que el viento se amanse totalmente y la lluvia sea generosa. Muchas personas de organismos públicos y particulares se han dedicado a frenar y controlar, dentro de lo posible, el avance devastador de las llamas, arriesgando sus vidas. Además de las cuatro muertes que se llevan contabilizadas entre los cercados por el fuego, los daños materiales son elevadísimos, y la aniquilación del ecosistema forestal y su hábitat natural es desolador.

Los pirómanos suelen actuar en solitario, se complacen y disfrutan al contemplar el fuego que provocan, tienen una tendencia-maníaca obsesiva por éste; incluso pueden aprovechar el originado por terceros, y aportar su particular antorcha neroniana por el efecto contagio. Otros incendiarios actúan por motivos distintos y diferentes. En cualquier caso, Galicia se ha estremecido y sufrido, y el resto de España comparte su dolor.