Las ganas de fiesta y de reencuentros con amigos
lleva a bastantes jóvenes a no guardar las medidas requeridas para evitar
contagiarse y transmitir el virus. Como era de prever, el fin del “ Estado de
Alarma “ se lo han tomado los referidos irresponsables como una invitación a la
barra libre, apareciendo ya los temidos rebrotes de modo preocupante. Las “
quedadas “ citadas, cuando van acompañadas del consumo inmoderado de alcohol y/o
la ingesta de drogas, provocan un efecto desinhibidor, una euforia artificial y
la subsiguiente inobservancia de las mínimas precauciones. Son culpables también
los dueños o regentes de los locales cerrados que lo permiten o hacen la vista
gorda, motivados en ocasiones por hacer más caja.
Cabe pensar que si la mayor gravedad o la
letalidad del coronavirus se hubiera cebado
entre la gente joven, en vez de en los ancianos y personas de gran riesgo por
sus antecedentes patológicos, “ otro gallo cantaría”. Las “ quedadas “
mencionadas y fuera de control , diurnas o nocturnas, son el preludio de la
mayor parte de los contagios que se producen, no reparándose en las
consecuencias malignas que posteriormente pueden repercutir en el ámbito
familiar, laboral y en el de las relaciones sociales normales.
Bien diferente es el comportamiento cívico y
solidario que se observa en gran parte de la juventud. Conmueve y gratifica ver
con qué mimo sacan a pasear a sus mayores, haciéndoles la compra, recados
diversos y colaborando en las tareas domésticas ¡Qué gran orgullo sienten los
ancianos al verse atendidos por sus nietos e hijos ! El caso es que la locura
irresponsable de unos cuantos puede echar por tierra el sacrificio y
desprendimiento de la mayoría. La vuelta atrás sería catastrófica para
todos.
Capítulo aparte a lo
expuesto, es el riesgo de la apertura de fronteras, del que no vamos a tratar
ahora con sus pros y contras. Simplemente apuntar la necesidad de encontrar el
equilibrio justo, para conjugar la salvaguarda de la salud pública con la
recuperación económica y el despegue del sector turístico.
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