Domingo de Ramos,
inicio de la Semana Santa.
Entrada triunfal de Jesús en
Jerusalén
a lomos de un borrico.
¡” Bendito el que viene en el
nombre del Señor “ !
gritaban los que le esperaban y
acompañaban.
Hoy se conmemora el magno y divino
evento
en la Eucaristía. Se enarbolan palmas y ramos de
olivo
en las procesiones, al canto del
Hosanna.
Jubiloso se manifiesta el fervor cristiano.
En los días siguientes de Pasión, pesadumbre y
contrición.
Al Enviado del Padre le llegará la hora del
Sacrificio en la Cruz.
Holocausto para redimirnos de nuestros
pecados,
y resucitar como Él. La vida eterna vence a la
muerte.
Insondable misterio, sustentado por la
Fe.
Te rogamos no flaquear, Maestro y
Señor.
Eres nuestro refugio y consuelo. Sin Ti, no hay
salvación.
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