LA “ PELA “

La “ pela es la pela” y se procura tenerla y mantenerla. Al conseller de la Generalitat catalana Jordi Baiget, perteneciente a la formación nacionalista PDeCAT( antigua Convergencia) e independentista, no le importaría ir a la cárcel por lo del referéndum ilegal y otras gaitas secesionistas, según ha manifestado; pero no quiere que su implicación repercuta en contra de su patrimonio ni en el futuro económico de sus hijos. Y es que, cosa lógica, a nadie le gusta que le toquen la cartera ni se ponga en peligro la economía y el futuro familiar. Por tales manifestaciones y algunas reticencias, referidas más a las formas del “ proces” secesionista que al fondo, ha sido cesado fulminantemente por el Presidente de la Generalitat Carles Puigdemont.

Otros políticos de la misma camada que Baiget piensan lo mismo, pero no se atreven a levantar la voz públicamente, aunque para sus adentros se barruntan el “ momio” que podrían perder en caso de ser inhabilitados. Hasta el funcionariado de la Generalitad, ayuntamientos y un buen número de alcaldes están preocupados por las consecuencias que les podría acarrear si incurren en la ilegalidad o se ven salpicados por la misma.

La cosa es que en Baiget ha hecho gala del “seny”, de ese sentido práctico y común en el que prevalecen la sensatez y la cartera sobre los delirios. Demasiados catalanes persisten en su separatismo a la nada, empeñados en “ sostenella y no enmendalla”. Los días corren rápidos y el 1 de Octubre está a la vuelta de la esquina. Los resortes legales del Estado y la acción del Gobierno no deben vacacionar, más bien tienen que apresurarse para abortar las pretensiones secesionistas y no esperar a los hechos consumados. Los actos preparatorios contra la unidad de España y el orden constitucional saltan a la vista; hay sobradas razones para actuar ya.