PEDRO SÁNCHEZ INSISTE Y PERSISTE

Si el líder socialista Pedro Sánchez tuviera un criterio de Estado razonable, el suficiente sentido común, y una responsabilidad ya demostrada, aparcaría para mejores tiempos sus planteamientos políticos, y se dedicaría preferentemente a respaldar cuantas acciones constitucionales emprenda el Gobierno ante el golpe de Estado anunciado, por activa y por pasiva, por los secesionistas catalanes.

No es el momento de abogar por la reforma de la Constitución, ni de plantear la España plurinacional, que fraccionaría aún más España y originaria mayores desigualdades y agravios interterritoriales. Al contrario, procede hacer piña con las fuerzas constitucionales para afrontar el mayor peligro que nos acecha: el ilegal órdago independentista lanzado al Estado y contra la unidad nacional. Y para ello, lo primero que tendría que hacer es desprenderse de compañías como la de Podemos y similares, que propugnan claramente  poner “ patas arriba “ al Estado y hacer que hinque la rodilla el actual régimen democrático y constitucional.

Pedro Sánchez ha pasado del “ no es no”, al “ si, pero...”, desmintiéndose cada dos por tres, lo que obliga a sus colaboradores a matizar sus palabras. Su única obsesión y ambición es alcanzar la presidencia del Gobierno. Podría conseguirlo algún día si actuase con lealtad y prudencia, pero no parecen ir por ahí sus tiros. Yerra en el camino que ha reemprendido, y él y su partido podrían acabar reducidos a la insignificancia y deglutidos por los que corteja. Lo sabe, pero insiste y persiste por si acaso...Ya se verá cómo acaba esta historia de una ambición, mas el presagio no invita a echar las campanas al vuelo.