PRIORIDADES

Los síntomas de desaceleración económica se observan y vienen siendo señalados por solventes analistas, contradiciendo las opiniones gubernamentales- que niegan las evidencias, aunque las conocen también-. Se quiere afrontar la preocupante situación con la subida de impuestos y el aumento del gasto público, que son viejas recetas socialistas fracasadas, con la pretensión descabellada de mantener y extender el bienestar social con tales medidas.

Lo único que se conseguirá con ello es acentuar el paro, desincentivar la inversión productiva, la pérdida de poder adquisitivo, el encarecimiento de la cesta de la compra y de los servicios, así como el incremento de la economía sumergida. Además, si se falla en el trabajo eficiente, en la seguridad jurídica y en el fomento del I+I-D, se crean obstáculos para la competitividad y la expansión tanto en los mercados emergentes como en los ya asentados.

La base prioritaria para enfrentarse al reto actual es la unidad y el compromiso inequívoco de ir juntos en la dirección indicada, alejada de los intereses disgregadores, tanto partidistas como localistas. La acción gubernamental debe guiarse por prioridades, dijo Pedro Sánchez en una entrevista televisiva concedida a la Sexta. No parecen principales, urgentes ni necesarias algunas de las medidas que ha impulsado en estos tres meses como Presidente del Gobierno; mas bien parece que su prioridad es él: seguir ejerciendo el poder. Ojala, abandone sus vaivenes, obsesiones, querencias destructivas y narcisismo, y se centre en la realidad. Haría falta un milagro, pero no es un hombre que crea en ellos. Lo peor es que su forma de ser y actuar no es una excepción.