DESTITUCIÓN DE LA DIRECTORA DEL CNI

 

 

 

 

 

 

El espionaje legal a los separatistas-sediciosos catalanes se ha cobrado la primera víctima, la hasta hoy directora del CNI. Es la cabeza que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, les ha servido en bandeja, para continuar contando con sus apoyos y le permitan seguir en el poder. Estos no se conformarán; querrán más y más en sus insaciables pretensiones, y Sánchez irá cediendo, como es habitual en él, mientras los barones y demás prebostes del actual socialismo “ sanchista “ no le digan ¡ Basta ! Como esto es improbable por apego a las poltronas, sólo quedará el recurso de que la militancia de base, que le votó, deje de hacerlo en las futuras generales ante el peligro que representa para España.

 

Los enemigos internos de la Patria nunca se inclinarán a favor del constitucionalismo del centro-liberal y el de las derechas. Por ello es necesario también que estas formaciones políticas se concierten para que puedan conformar pronto un Gobierno fiable. Si Sánchez, cuando sea desalojado del sillón presidencial, aspirara a un cargo de relevancia en el exterior, quienes no lo conozcan, que lo compren. No lo echaremos de menos.

 

¿ Quién será la próxima víctima ? De momento, Margarita Robles se ha salvado de la quema. Continúa en el Gobierno, pese a las exigencias de su cese por la parte canalla del país. Es la miembro del Ejecutivo mejor valorada y más estimada por la gente de bien; pero ya se verá qué pasa con esta eficaz ministra de Defensa cuando finalice la Cumbre de la OTAN en Madrid, que tantos recelos ha originado sobre su conveniencia de que tenga lugar aquí, por razones de seguridad y confidencialidad respecto a lo que en ella se debata. Queda en el aire si Margarita Robles hubiera debido presentar su dimisión, como muchos esperaban, si la directora del CNI era cesada. Salvo aspectos que se nos escapan, tal gesto de dignidad la ensalzaría más, pues no está bien visto ni apreciado “ dejar en las estacada “ a una fiel servidora del Estado.

 

Cabe suponer que el nombramiento de la nueva directora del CNI sea una decisión personal de Margarita Robles, ya que goza de su confianza personal, es una profesional veterana de “ La Casa “, con dilatada experiencia de muchos años en la misma, y hasta hoy fue subsecretaria de Defensa con la citada ministra y antes su jefa de Gabinete. Acertada nos parece la designación de la entrante, como precipitada y no bien explicada la destitución de la saliente. En cualquier caso, ambas gozan de buen predicamento en la “ Casa “, en la que entraron en 1983 ¡ Suerte a las dos, al Centro y a España !