De pillo a pillo van Putin y Trump, negociando
el plan de paz y el final de la guerra en Ucrania.
¿Quién se llevará el gato al agua ? Todo parece
indicar que a Zelenski no se le hará mucho caso
y que su trasquilado e invadido país acabará
con el pelo cortado a cero.
El norteamericano, capitalista y avezado
negociante,
tiene por contrincante al ruso, experto espía comunista.
Aquél tiene arranques furiosos, si no le complace
el que tiene enfrente; el segundo es un tímpano de
hielo, masa flotante sobre las aviesas intenciones
que debajo esconde.
Ambos se temen, respetan y se lanzan
flores;
polos opuestos que se atraen.
Tras cuatro años de guerra entre Rusia y
Ucrania,
si se alcanza un alto al fuego, prólogo del fin
de
la guerra, será un espejismo de efímera paz.
Putin seguirá con sus pretensiones de
fagocitar
a Ucrania y no cesará de ser una amenaza
para las democracias europeas.
Así lo pronostican los analistas. El tiempo
dirá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario