No te atormentes ni quejes
de tus pesadas cargas y pesares.
Te afligen, duelen y te hacen
sufrir.
No des tres cuartos al pregonero.
Desahógate con voz quieta;
confíalos al Ser Supremo, prudente y
amigo.
Te dará la llave de la Fe, la
Esperanza
y la Caridad, virtudes teologales
que en el Mundo se tratan de borrar.
Su puerta estará siempre abierta,
para dar cobijo al silente dolorido.
¿ Dónde hallar ese amigo ?
Va siempre contigo, marcando el recto
camino.
Se llama Jesús. Sufrió torturas, murió en la
Cruz,
resucitó, ascendió a los Cielos y se sentó
a la diestra del Dios-Padre
Transmutado en pan, te espera en el
Sagrario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario