España es el país que más misioneros tiene repartidos por el mundo, unos 10.000, y el segundo en aportar dinero para las misiones. El último domingo de Octubre celebra “ El Día del Domund “, y debemos procurar ser generosos con los donativos, según las posibilidades personales de cada cual, al margen de las oraciones que se eleven para que Dios fortalezca a los que ha llamado a tan trascendental destino vocacional en las zonas más depauperadas del Orbe, asumiendo carencias y en varias de ellas peligros, incluso para la propia vida. No tratan solo de evangelizar, sino que están junto y con los más desvalidos, compartiendo sus penalidades y desvelándose por aliviarlas y remediarlas.
Los testimonios relatados por los misioneros y
misioneras, acerca de sus vivencias prolongadas
durante años, sobrecogen. Dicen “ recibir mucho
más de los misionados de lo que ellos a éstos les dan “, se robustece su
espíritu humano fraternal y dan gracias al Altísimo por haberles señalado para
ejercer tal función, sacrificada y gratificante a la vez. El ejemplo de Amor y
compromiso de los que misionan es un acicate para facilitarles su labor,
apoyarles económicamente y rezar por ellos, en correspondencia cristiana de los
que estamos en nuestros hogares y vivimos con mayor o menor holgura. Sea cual
sea nuestra posición y posibilidades, la oración no debe faltar. El “ Domund “
es una fecha señalada y especial, que deberíamos prolongarla particularmente
durante los restantes días del año. El Amor caritativo no tiene fronteras ni
límites temporales; tampoco lleva la etiqueta de caducidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario