Lo que muchos demógrafos pronostican puede ser
realidad dentro de 30-50 años. Debido a la bajísima tasa de natalidad en Europa,
comparándola con la elevada de la población musulmana afincada en la misma, ésta
será mayoría en gran parte de los países que conforman nuestro Continente,
repercutiendo en contra de los modelos socio-culturales, políticos, religiosos y
de hábitos que, pese a las características propias de cada nación, nos
caracterizan. Podría ser que un estilo de vida y de civilización fuera
reemplazado por otro nuevo, que nos es ajeno. Vamos, paso a paso, camino de
ello. No se trata de practicar ni de infundir la islamofobia, que siempre es
rechazable, sino de exponer una problemática que está a la vista de cualquier
atento observador, y que de seguir la tendencia señalada, podría dar un vuelco
al corazón de Occidente.
El cardenal ghanés Peter Turkson dijo, en 2012,
durante el Sínodo para la Nueva Evangelización, celebrado en el Vaticano, que la
baja natalidad en los países europeos era una de las causas de la
secularización, y una consecuencia de determinadas políticas de planificación de
los nacimientos, a la vez que señalaba la expansión del Islam por toda Europa y
demás continentes.
Juan
Pablo II, el 9-11-1982, se dirigió a Europa diciendo: “ Desde Santiago, te lanzo,
vieja Europa. Descubre tus orígenes. Aviva tus raíces. Revive aquellos valores
auténticos que hicieron gloriosa tu historia y benéfica tu presencia en los
demás continentes. Reconstruye tu unidad espiritual, en un clima de pleno
respeto a las otras religiones y a las genuinas libertades. Da al César lo que
es del César y a Dios lo que es de Dios. No te enorgullezcas por tus conquistas
hasta olvidar sus posibles consecuencias negativas. No te deprimas por la
pérdida cuantitativa de tu grandeza en el mundo o por las crisis sociales y
culturales que te afectan ahora. Tú puedes ser todavía faro de civilización y
estímulo de progreso para el mundo”.
Cuestiones
demográficas aparte, aunque pesimistas, Europa no “ aviva sus raíces “. Se
combate en Ucrania contra la invasión de su país por la guerra iniciada por
Rusia; hay peligro de una escalada bélica a nivel mundial y nadie puede
pronosticar con seguridad lo que el futuro nos deparará. Por añadidura, Europa
se descristianiza y va en vías de islamizarse. Que Dios y Alá hagan que nos
toleremos y nos llevemos bien.
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