lunes, 20 de diciembre de 2010

EL JAMÓN DE TREVÉLEZ Y EL ISLAM

 

Al no ser 28 de Diciembre, día de los Santos Inocentes, damos credibilidad a la información publicada hoy por el Diario el Mundo que se transcribe más abajo; aunque lo cierto es que  la práctica totalidad de los m.c.s. han  difundido el hecho acaecido.

Pensándolo bien no sorprende la protesta del escolar ni la de sus padres, conociendo las pretensiones del Islam respecto a Occidente. Lo que se echa de menos es la merecida reacción que debería haberse producido en la Comisaría y en el Juzgado  cuando se presentaron los padres a denunciar: señalar con el dedo la salida a la calle sin más trámites ni pérdida de tiempo, en todo caso recurrir al refrán “a reclamar al maestro armero”. Lo que no entra en la cabeza es que se admitiera la denuncia, cuando hasta el poco versado en derecho sabe que, a tenor de los hechos trascendidos y se suponen fiables en cuanto a su correspondencia con lo acaecido, no hay el más mínimo indicio racional de criminalidad (delito o falta). Cabe suponer lo que para sus adentros pensarían los pacientes funcionarios y lo que “ les pediría el  cuerpo”, tal vez sacarlos a morcillazos de Comisaría o Juzgado; veleidad esta vetada, so reproche penal o administrativo, en una nación occidental y estado de derecho del que se aprovechan los musulmanes. Solo  en un país acomplejado y timorato, que anda a remolque de la cobardía de sus gobernantes, caben estas cosas y así cabe explicarse que se admitiera la denuncia “por si las moscas”, “para no comerse ninguna reprimenda o marrón”, “por escribir no pasa nada, por no hacerlo te la puedes cargar” aunque sea la estupidez jamás imaginada.

El Colegio debería aplicar, con el respaldo de la Junta de Andalucía, lo de “si no quieres una taza de caldo, toma dos” y enseñar lo bien que acompaña al taquito o lonchita de jamón un vasito de vino, con ingestas moderadas. Como dice un amigo:” del cerdo me gusta hasta los andares”.Bien haría la Junta, en solidaridad con el profesor, invitar al claustro docente a un cochinillo asado, aunque no fuera en Segovia por eso de las distancias kilométricas.

Si los occidentales (cristianos, agnósticos o ateos) vamos a países musulmanes  respetamos, por la cuenta que nos trae, sus costumbres y tradiciones. En justa correspondencia y reciprocidad ellos deberían hacer lo propio; pero no, a la chita callando en principio y ya en claro desafío nos quieren, porque sí, islamizar pues para ellos somos impuros e infieles. Ya está bien de monsergas. Nadie escarmienta en cabeza ajena y sabidos son los asesinatos, represiones y restricciones contra los cristianos por parte de los fundamentalistas islámicos (¿dónde empieza y acaba el Islam radical?). De no afrontar con decisión y valentía el peligro, los púberes de hoy, niños y niñas, serán los sometidos y esclavos del mañana. Si no reaccionan los Gobiernos, algún día lo hará el pueblo y será demasiado tarde para todos, musulmanes o  no.” No hay que dar de comer con la mano a quien te la ha de morder”.

Puede parecer desorbitado lo expuesto y políticamente no correcto, sobre todo para los avanzados en lo de la alianza de civilizaciones, por una “menudencia” a propósito de la cura del jamón en Trevélez; pero  puede ser la “gota que colma el vaso”. ¿No lo creen?, escuchen a la gente normal y corriente…Las cosas se saben como empiezan, pero no cómo pueden acabar y esto viene oliendo muy mal hace años; pestilencia que no proviene precisamente del rico y sabroso jamón.

Por su interés, aunque nada tiene que ver con el jamón de Trevélez que se recomienda comer, se reproduce, tras el artículo del diario el Mundo, entrevista publicada en el diario ABC el 22-11-2010 al misionero salesiano en Pakistán Miguel Ángel Ruiz Spínola.

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ARTÍCULO DIARIO MUNDO (20-12-2010)

“Que los musulmanes no comen cerdo es algo conocido. Pero que tampoco les gusta oír hablar de jamones resulta chocante. Sobre todo, como ha ocurrido, cuando una familia denuncia al profesor de su hijo por haber utilizado en clase de Geografía esta parte del cerdo como ejemplo de su explicación.

Increíble pero cierto. Fuentes judiciales han explicado a ELMUNDO.es que un estudiante de credo musulmán, menor de edad, ha denunciado, a través de su familia, a un profesor del IES Menéndez Tolosa de La Línea de la Concepción. El joven musulmán se sintió ofendido durante una de las clases.

Según las fuentes consultadas, este alumno no aceptó de buen grado la referencia que hizo el profesor al clima frío de la localidad granadina de Trevélez, que favorece la curación del jamón, producto por otro lado típico de la región.

El estudiante pidió que no se hablase de ese asunto, debido a su religión, y tras salir de clase lo comentó en su domicilio y los padres, sin acudir al centro ni consultar con los profesores, decidieron interponer una denuncia ante la Comisaría de la Policía Nacional y el juzgado.

El profesor, que se muestra bastante sorprendido, ya ha prestado declaración. Y la Policía, por su parte, ha iniciado una investigación de los hechos. Los sindicatos de enseñanza del Campo de Gibraltar están a la espera de conocer más detalles sobre lo acaecido, pero la primera reacción de todos ellos ha sido la de sorpresa.

La Delegación provincial de Educación de la Junta de Andalucía también está recabando datos sobre lo ocurrido, aunque la sensación en la comunidad educativa linense es de sorpresa e incluso de cierta indignación. El afectado, que de momento no ha hecho declaraciones, es un reputado profesor, según indican desde los sindicatos, que lleva ya más de 20 años dando clases y que nunca ha tenido problemas con los alumnos.

Las fuentes judiciales a las que ha tenido acceso este diario entienden que lo normal en estos casos es que la denuncia sea archivada en los próximos días. Otra cosa será lo que pueda ocurrir a nivel interno en el IES Menéndez Tolosa, ya que el profesor y el alumno musulmán, en principio, se tendrán que seguir viendo en las próximas semanas.

El ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, por su parte, en declaraciones al programa Herrera en la Onda, de Onda Cero, ha señalado esta mañana que esta denuncia "no puede prosperar en ningún sitio. No se me ocurre otra cosa. Pienso que es una denuncia infundada"

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DIARIO ABC (22-11-2010, Entrevista al misionero salesiano en Pakistán, Miguel Ángel Ruiz Spínola) :

“Siembra cristiana en territorio poco propicio. ¿Desde cuándo?

-La presencia de los salesianos nació con nuestro colegio de Lahore y con el de la ciudad de Quetta. Allí es un centro en el que la mitad de los alumnos son católicos y la otra mitad musulmanes.

-¿Es fácil esa convivencia?

-Se está volviendo más difícil. Era mucho más sencillo hace nueve años, cuando yo llegué. Pero se ha ido introduciendo en la sociedad que nosotros pertenecemos a una categoría inferior. «Pakistán» significa precisamente «la tierra de los puros» y, en consecuencia, nosotros somos impuros. Es como la situación de la mujer. Por ley, en Pakistán el testimonio de una mujer no tiene validez ante los Tribunales porque es solamente el 50 por cien de un testimonio válido. Solo el de dos mujeres cuenta igual que el de un hombre.

-De modo que en el caso de la cristiana Asia Bibi, condenada a muerte por blasfemar contra el Islam, confluyen todos los inconvenientes.

-Todo vino de que bebió agua de un pozo y otras mujeres musulmanes la acusaron de «contaminarlo». Y le aplicaron la maldita ley de la blasfemia. La sentencia ha salido ahora, pero esta mujer madre de cinco hijos se ha pasado un año encarcelada. Y yo me pregunto si a esta señora, si se anula su condena a muerte, la van a indemnizar cuando la liberen, como a los presos de Guantánamo. Los cristianos estamos expuestos e indefensos, y eso se repite en muchas situaciones. Esta ha sido una más.

-¿Se sienten allí un poco como en catacumbas?

-De alguna manera. El superior de los jesuitas en Pakistán, un sacerdote australiano, me ha dicho: «Miguel, hasta ahora el objetivo del Islam radical aquí en Pakistán ha sido imponerse sobre los musulmanes que no piensan así. No somos el objetivo número uno, pero el ataque en Irak de hace dos semanas puede hacer cambiar la marea. Cuando se den cuenta de que atacando a cristianos logran más atención e incluso pueden condicionar las decisiones de los gobiernos de Occidente, entonces la cosa se va a poner muy serias, no solo en Pakistán sino en toda la región».

-Mientras, en Occidente muchos se atreven a denigrar al Papa pero jamás al Islam.

-El problema es que el mundo musulmán ha olido el miedo de Occidente y, como ve que nuestra sociedad se está separando cada vez más de Dios, consideran que tienen el papel en la historia de acercar el mundo a Alá. Están cada vez más convencidos de que su presencia aquí es necesaria.

-¿Es una amenaza más allá del factor Al Qaida?

-Desde luego. La gente que participa de este entendimiento del Islam cree que la sociedad tiene que dejarles vivir su vida en primera instancia y después, cuando sean suficientes, impondrán ese estilo de vida en los demás. Este es el auténtico peligro, mucho más que Al Qaida.

-Precisamente el sacrificio del cordero ha sido declarado este año fiesta oficial en Ceuta y Melilla.

-Y mientras eliminamos fiestas religiosas nuestras tradicionales de hace siglos. Aquí es donde estamos perdiendo nuestra identidad y debilitándonos. Europa dentro de cincuenta años va a tener muy poquito que ver con la que conocemos hoy.

-¿Presiente una Europa islamizada?

-Es un proceso que ha comenzado. Hasta dónde puede llegar eso no lo podemos decir ninguno, pero que ha comenzado y está aquí, sí. Y que hay gente que insiste en negarlo, también.

-¿Y qué hemos de hacer los católico s?

-No vamos a devolver nunca mal con mal, eso iría contra nuestra propia fe. A nosotros lo que nos queda es seguir haciendo un trabajo duro de testimonio del Evangelio. Y eso no lo vamos a hacer reaccionando airadamente: si quitan el crucifijos de un aula y un padre está convencido de que esa es la fe que quiere transmitir a su hijo, pues que le pinte un crucifijo en el libro de lengua. Por ejemplo.”

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