EL MUNDO DE LA NOCHE

 

El” mundo de la noche” es un submundo cuya tenue luz proviene de farolillos de colores; manto encubridor de desengaños, frustraciones, bajas pasiones y atrayente reclamo para quienes, queriendo olvidar , huir de si mismos o simplemente pasar un rato agradable, buscan posada y diversión pasajeras, ajenos a lo que se cuece en la trastienda . Nada nuevo: ha sido, es y será.

Tiene su reglas,rivalidades, complicidades, pactos sobreentendidos y leyes del silencio. En el “ambiente” de la noche los distintos profesionales se conocen, procuran no darse la espalda y mostrar fingida sonrisa.

Los nebulosos y en ocasiones turbios negocios,cuya “marcha” empieza sobre medianoche y finaliza al asomar la aurora, mueven grandes cantidades de dinero con ingeniosas y complicadas contabilidades. Declarados o inscritos a título personal, como sociedades o, a veces, a nombre de testaferros, en ocasiones son auténticas telarañas en cuyas redes pueden quedar atrapados influyentes personajes que bien por interés, ingenuidad o compromiso social, no han sabido guardar las prudentes distancias y prevenciones.

Mientras muchos padres permanecen en vela nocturna a la espera del regreso del hijo o hija que salió a distraerse, hay quienes “hacen el agosto”   con algunos de esos locales de ocio y lo que en su entorno se mueve.Cada nueva apertura, con independencia del mayor o menor nivel glamuroso que se le quiera dar, es lugar propicio para que llueva el “maná”, lo que no implica generalizada crítica o  descalificación. Como en botica, hay de todo y no cabe desdeñar los puestos de trabajo que crean directamente o ayudan a mantener a través de proveedores y del ramo técnico(electricistas,fontaneros,albañiles, decoradores, etc....)

En fin, cosas del “mundo de la noche”, aunque también existen los “garitos” diurnos y de 24 horas, que perduran y se acrecientan en el tiempo y con las sucesivas tendencias de  modernidad, ocio y especial relax. Lógicamente “ no son todos los que están”por lo apuntado antes, pero “haberlos, haylos” en demasía y con insospechadas tolerancias y protecciones. No todos los que tienen poder y/o ascendencia social, por humanos  están inmunizados contra ciertas debilidades; pero ¿ quienes del común pueden asegurar el sentirse a salvo?

En torno a la noche se intensifican las asechanzas de la sociedad alienada y permisiva que hemos creado; peligrosa para la juventud, poniendo a su fácil alcance, como normal, lo que antes estaba reservado a golfos, bohemios excéntricos y otros noctámbulos por devoción, salvando las distancias y con las puntualizaciones que se quieran; pero sin aquel tipismo costumbrista y con las incógnitas actuales:¿ Donde estará, con quién,cuándo y cómo regresará?, con la angustia de los padres por si suena el teléfono cual presagio de mala noticia.

La reglamentación de este tipo de establecimientos está establecida, pero una cosa es la norma y otra su cumplimiento y efectivo control para detectar y sancionar las irregularidades. La situación es extrapolable a otros tipos de actividades en cuanto a la hiperinflación en España de leyes, reglamentos y ordenanzas y su escasa observancia.

Posiblemente la proximidad de la Noche Vieja hayan hecho brotar estas reflexiones al hilo de lo peligrosa que se ha vuelto la noche, a cuya celebración fuera del ambiente familiar se incorporarán por primera vez muchos  adolescentes y jóvenes. Noches proclives a mezcla explosiva de creciente agresividad gratuita, alcohol, drogas, trifulcas, descontrolados botellones y temerarias conducciones. Todos deseamos que la diversión vaya pareja con la armonía, incluidos los propietarios y empleados de los locales nocturnos dedicados al ocio; pero, por desgracia, hay gente predispuesta a liarla y avasallar por insignificancias. Los descerebrados abundan y se crecen en grupo, sin obviar a algunas mujercillas a las que también hay que “darles de comer aparte”.

Ojala no resultara ilusoria pretensión el desear a todo/as FELIZ NOCHE VIEJA, que 2011 empiece con buen pié, que quienes salgan regresen sanos a casa y el nuevo año sea generoso, especialmente en salud, trabajo y armoniosa convivencia.