Pasados los festejos navideños, hoy 9 de Enero volvemos a la realidad. Ya, de buena mañana, era ostensible la circunspección en los rostros, el enmudecimiento o el hablar desganado. Ninguna buena noticia transmitían las ondas, las portadas de los diarios expuestos en los quioscos nada halagüeño anunciaban. El tímido saludo del “buenos días” apenas era perceptible y por respuesta una mueca que pretendía ser esbozo de sonrisa, o un “hola, buenos” dicho con desgana. Dominaban los aspectos tan sombríos como el presente y meses venideros.
La Patronal, UGT y CCOO, aún no han llegado a un acuerdo, cuando tenían de plazo hasta el 7 de Enero. Hay unos pocos días de prórroga y es muy posible, además de obligado, que el Gobierno tenga que cortar por lo sano si no salvan sus diferencias.
Los que deberían estar callados e intentar pasar desapercibidos, Rubalcaba y Chacón, optan a la Secretaria General del PSOE, con lo que cierran el paso a inéditas revelaciones, regeneracionismo y aires frescos. Los viejos aparatos socialistas se afanan en seguir con sus canonjías y nepotismos, temen perder poder e influencia y, arrimando el ascua a su sardina, quieren perpetuarse, cual la momia de Lenin, para estar en privilegiada posición de salida cuando llegue el momento de la alternancia gubernamental. Tras “La Gran Depresión” dirigida por Zapatero, en cuyo reparto actuaron de principales protagonistas, ¿quieren los dos aspirantes asentar sus posaderas en la silla para dirigir “El Hundimiento Total?. Ambos y quienes les avalan ya han dado muestras suficientes de lo que son capaces; que no degraden más a España ni humillen a sus militantes honrados y patriotas, pues aunque no lo crean también los hay.
Ante la herencia recibida, el nuevo Gobierno dictó las primeras medidas de urgencia. No han sentado bien los incrementos del IRPF ni del IBI y el personal se pregunta ¿eran prioritarios y necesarios? De momento, mayoritariamente se han recibido con desencanto y preocupación. Suelen concederse noventa días de cortesía para todo nuevo gabinete gubernamental; pero la situación actual no está para tan largo plazo y se suponía que el Gobierno, al tomar posesión, era conocedor, aún muy aproximadamente, del estado de las cuentas. El saber y la opinión de gente solvente de su partido, como previsiones e informes externos fiables, no le habrán faltado. El votante pepero es, por lo general, más exigente y autocrítico que el de izquierdas; que nadie piense que se ha dado un cheque en blanco, el tiempo corre rápido.
Se ha echado en falta la comparecencia ante la opinión pública de Rajoy explicando el porqué de las drásticas medidas y las por venir. No solo hay que decir la verdad, sino explicarla convincentemente. Nadie se asusta si hay que poner la casa patas arriba si con ello la salvamos. Este viejo caserón, el más antiguo de Europa, tiene demasiadas grietas y termitas. A Rajoy se la he encomendado la restauración; que ponga decisión, valentía y acierte. Su máxima aspiración política la ha conseguido, ser Presidente del Gobierno de España. Goza de mayoría absoluta, de él depende cómo lo retratará la historia cuando deje de serlo. Por bien de España y los españoles deseamos que, cuando llegue el momento, sea elevado al sitial del honor.
TODAVÍA NOS FALTA LA SUBIDA DEL IVA.
ResponderEliminarAUNQUE CREO ESTAS MEDIDAS SON NECESARIAS, POR NINGÚN SITIO VEO ACCIONES PARA REACTIVAR EL EMPLEO E INCREMENTAR EL CONSUMO.
LO QUE TU DICES, VAMOS A DARLE AL NUEVO GOBIERNO UN MARGEN 90 DÍAS, PERO TODOS ESPERAMOS ALGUNA MEDIDA QUE PERMITA SOÑAR CON LA MEJORA DE LA SITUACIÓN, Y POR AHORA NADA.
SUERTE RAJOY.
LICO.2021