martes, 21 de enero de 2014

DE GAMONAL AL AMONAL.

 

Protestas vecinales, con mayor o menor fundamento, contra planes de reordenación urbanística en una una barriada o zona determinada de una ciudad, están al orden del día. Lo anormal es que la oposición vecinal a las obras iniciadas en la burgalesa calle Vitoria del barrio Gamonal, aprobadas por el Ayuntamiento, se haya extendido a diversas capitales españolas. Extraña solidaridad por un asunto distante, menor e irrelevante, comparado con los que afectan a nivel nacional.

No resulta raro que con motivo de las protestas y manifestaciones en y por Gamonal, elementos de extrema izquierda hayan dado rienda suelta al vandalismo. Es lo suyo, cualquier pretexto les vale para su lucha y violencia callejera; especialmente en donde gobierna la llamada derecha. La cuestión es erosionarla y crear el clima que favorezca apearla del poder. El problema del que se aprovechan, nada les importa. Actúan conforme a los métodos de guerrilla urbana, dentro del consabido marco de agitación y propaganda.

El alcalde de Burgos ha decidido suspender las obras, diciendo que es para preservar la convivencia ciudadana, pareciendo más bien que ha sido una cesión ante la violencia desatada. Como los disturbios se iban extendiendo a otras ciudades, se plantea si ha adoptado tal medida por indicación superior. Sea por esta o " motu propio", el resultado es que, parafraseando, Gamonal bien vale dejación de la Autoridad.

La Asamblea vecinal y quienes apoyaron las lícitas manifestaciones pacíficas han perdido parte de la razón que pudieran tener, al seguir con sus concentraciones pese a la suspensión de la obra. Al exigir, además, la exoneración penal de los violentos que protagonizaron el vandalismo, con cuantiosos daños y agresiones a la policía, han quedado retratados como amparadores del desorden. Y es que muchos movimientos vecinales están infiltrados por la izquierda hasta los tuétanos. Con su asamblearismo pretenden sustituir la voluntad popular en las urnas.

Algunos han querido, y en parte conseguido, hacer de Gamonal el explosivo amonal. Se están minando, con este y otros casos de muchísima mayor gravedad, los cimientos del Estado. Todo obedece a un determinado plan.

1 comentario:

  1. De acuerdo total.Lo de Gamonal no hay quien lo entienda
    Aquello es prácticamente una calle- carretera. Se quiso hacer más humano, más seguro y se ha convertido en una protesta nacional.
    Demencial.

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