Las mesnadas independentistas catalanas boicotean los mítines electorales de los partitos caracterizados por la defensa y reivindicación de España, lanzando a los participantes de éstos piedras y otros objetos, y llegando a la agresión física. Los últimos actos de barbarie en contra de VOX, como también los sufridos por el PP y CIUDADANOS, perpetrados en manada, ponen de manifiesto el carácter antidemocrático y violento de estos sujetos, así como la condescendencia o complacencia de las formaciones secesionistas a las que pertenecen, cuyo lema es: “estás conmigo o contra mí “ en favor del “ procés “, para hacer realidad la “ nación catalana “.
Producen bochorno e indignación estas salvajadas,
así como la participación de Otegui, que fue condenado en su día por terrorista
y hoy es diputado, en los mítines de ERC. Pero no debería extrañar, ya que son
como primos-hermanos en el común empeño independentista.
Se atribuye a D. Quijote la sentencia : “
Cosas veredes, Sancho, que non crederes”. Lo dijera o no, vemos en
la política española cosas impensables cuando se redactó la Constitución, aunque
el término “ nacionalidades “ barruntaba a “ pájaro de mal agüero “. Y en esas
estamos: con los buitres separatistas socavando los cimientos de España, con
PODEMOS echándoles una mano, y el socialismo “ sanchista “ con rumbo
descarriado.
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