Pero ¿ es que no hay nadie en el PSOE o con ascendencia sobre Zapatero que le diga que deje de decir tonterías cuando habla como Presidente del Gobierno de España? ¿Es que este hombre no tiene sentido del ridículo? Parece que no, pues viene haciendo de las suyas una tras otra. La última, que se sepa, ha sido en Oslo donde, entre otras extravagancias acompañadas de gestos teatrales y trascendentales pausas, dijo más o menos textualmente que el parado, cuando hace un curso de formación, deja de ser parado ya que está trabajando para su país y que a raíz de la crisis ha descubierto que la formación e innovación son fundamentales. Que se lo diga al obligado discente, por mor de no tener trabajo, que lo que quiere es una ocupación remunerada para atender sus necesidades personales y familiares básicas. No tiene desperdicio la causa del hallazgo sobre lo fundamental de la formación e innovación; o sea que hasta que no llegó la crisis se desconocía su importancia. ¡ Madre mía qué barbaridades!
Como es imposible que ZP desconozca la falacia de tales afirmaciones, que no escapa a la persona más lerda, ¿porqué las dijo?. ¿Toques de originalidad, repentinas iluminaciones, megalomanía,…? Vaya Vd.a saber. Lo que cierto es que con tales ocurrencias deja a los españolitos a la “altura del betún”.Que se permitiera tales bromas o chistosas licencias en privado ante amical y desenfada tertulia, incluso en el fragor de un mitin electoral en los que,con frecuencia, hay excesos, sería pasable y no pasaría de lo anecdótico; pero bajo ningún aspecto son tolerables y sí acreedoras a frontal rechazo cuando habla como Presidente del Gobierno de España.
(Una cosa es lo privado y otra lo institucional, aunque a menudo es problemático diferenciar ciertos límites en un cargo público y especial sensibilidad hay que tener cuando se entra en el terreno familiar. Por la red han circulado fotos de las hijas del Presidente cuando le acompañaron en la visita a Obama, de las que nunca se hizo eco” A media asta” por considerarlas ofensivas, como los comentarios sobre ellas, tanto para las hijas como sus padres. Hay límites que no se deben sobrepasar y no todo vale en la discrepancia política)
Los españoles no nos merecemos tener un Jefe del Ejecutivo de tal ralea y los socialistas con “vergüenza torera”, que los hay en abundancia excluyendo a l@s consabid@s palmer@s del “si señor”, no deberían dar soporte a un jefe de filas como él.
José Luis Rodriguez Zapatero ha desperdiciado la confianza por tantos en él depositada. Ha perdido toda credibilidad y autoridad moral, siendo objeto de chanzas, hasta ahora desconocidas, con un Presidente de Gobierno en ejercicio. Como botón de muestra y para acabar distendidamente, si así se puede calificar, se incluye presentación disponible en Youtube titulada “un parado de tantos “ de Mr.Vielas.
Por haber visitado la ciudad y tener amigos allí, dado el nivel de sensatez y conocimiento de los noruegos, me tranquiliza un poco.
ResponderEliminarLa gente del norte de Europa, suele ser consecuente, sobria, muy formada, de las que escucha para comprender y no para juzgar con prontitud. Ello me tranquiliza.
Que, desde luego éste señor, contribuye a que esa imagen de España en el exterior mencionado sea la que fué, la que se tuvo, será verdad, seguro. Que desde luego éste señor, previamente a su pronunciamiento debería "pensar", creo que es pedir mucho. Pero en mi opinión, hoy tras años de ser y estar, es difícil que con tan selecta y notable audiencia, lo consiga. Por mucho que se lo proponga no lo tiene fácil. Los españoles tenemos una imagen bien ganada,y en muchos ámbitos se nos considera. Quiero decir, que por todos sus intentos no creo que consiga dejar España a la altura de su deficiente nivel.
Ahora bien, la vergüenza ajena que sentimos no es "pecata minuta". Que se acepte todo en boca de éste señor, nos debe hacer autocrítica y desde luego, que nos merezcamos ésto, ya sería mucho decir. ¡No creo que progrese, salvo que se interprete que éste señor ha hecho comedia, cine cómico, interpretación y se quedó en 1º, suspendiendo con nota baja!
En ese sentido, yo estoy tranquilo, aún compartiendo lo expresado.
¡Por ahí fuera, no hay quién se lo crea y por aquí dentro, creo que muchos tampoco, cada vez afortunadamente menos!