La reciente orden gubernamental sobre la desinformación, justificada para evitar injerencias extranjeras en los procesos electorales, y en asuntos que afecten a la seguridad y soberanía nacional, ha generado desconfianza generalizada en los medios de comunicación y en los usuarios de la redes, ya que por su redacción podría representar también una intromisión en la libertad de expresión y difusión de noticias y escritos críticos con el Gobierno, el cual dictaría qué es verdadero o falso. Sospecha reforzada a tenor de lo manifestado por la ministra de Exteriores, Sra. González Laya,: "...Se trata de limitar que se puedan vehicular falsedades a través de radios, televisiones y también las plataformas digitales que falsean el debate público, que manipulan a la población y que pueden causar un gran quebranto a la democracia...”
Algunos afirman que es un proyecto de censura previa encubierta. Otros sopesan si habrá que auto-censurarse para evitarse problemas y disgustos. Pero “ La verdad sólo tiene un camino “, y todo lo que sea amordazarla es un ataque a la libertad. La Justicia es la encargada de valorar y sancionar, en su caso, por vía penal o civil las extralimitaciones a la libertad de expresión y opinión. El pensamiento solo no delinque.
Todos tendríamos que tener presente, especialmente el Gobierno, lo dicho por Antonio Machado: “ ¿Tu verdad no, la verdad; y ven conmigo a buscarla. La tuya guárdatela.” Es una invitación para ir juntos en su búsqueda, desterrando la mentira y la manipulación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario