miércoles, 30 de mayo de 2012

LOS CUERVOS AL ACECHO

 

Hay demanda generalizada para que se abra una Comisión de Investigación en el Congreso y comparezcan ante el mismo quienes, en principio, han podido llevar a España y españolitos a la ruina- por acción, clara negligencia u omisión-, sean políticos, responsables de corporaciones financieras afectadas (Cajas de Ahorro y Bancos), del Banco de España y otros también posibles implicados.

Se está exigiendo depuración de responsabilidades y que el pueblo sepa la verdad, pues es madurito y a estas alturas nada le va a sorprender ya que conoce lo que se publica y sufre en sus carnes e intuye lo oculto, lo que se trata de tapar.

De momento se pretende que la Comisión de Investigación se inicie con BANKIA. El PP se escabulle remitiendo a una subcomisión al efecto y en el PSOE hay división de opiniones ante la postura inicial de Rubalcaba, nada partidario de tal investigación; pero las posiciones de unos y otros podrían cambiar como es frecuente en el juego político.

Lo cierto es que dichas comisiones nunca han conducido a otro resultado que el tirarse los trastos unos a otros, pactando previamente ciertas intervenciones y tratando cada partido tapar sus vergüenzas, desgastar al contrario y justificarse ante los respectivos electorados. No recordamos, en las pocas hasta ahora practicadas, que se haya llegado a unas conclusiones de las que se haya dado traslado a la Autoridad Judicial o Fiscal cuando han salido a relucir indicios de delito; aunque la memoria nos puede fallar. Ello no es óbice para las exigencias de que se dé la cara y haya pública explicación. O se aceptan las reglas del juego democrático o  reconocemos que África empieza en los Pirineos y que eso de la democracia es una película de ficción " no apta" para el espectador español,

Vistos los antecedentes y reconociendo la legitimidad de la expresada petición, es nuestro parecer que para no perder el tiempo, escuchando excusas de mal pagador y mentiras a mansalva ,que debe primar la investigación a cargo de la Autoridad Judicial o Fiscal, llevada a cabo con independencia, sin prejuicios personales ni ideológicos, y que no se vea perturbada  por injerencias extrañas. Y después que cada cual apechugue con las consecuencias penales de su mal obrar y haga frente a las responsabilidades civiles por la hecatombe provocada.

No deberían continuar el resto de sus vidas en posición privilegiada sobre las víctimas quienes han llevado el barco y el pasaje al hundimiento, se han asegurado el futuro auto otorgándose escandalosas compensaciones millonarias sin precedentes en cualquier país serio y se han valido de informaciones reservadas al alcance de muy pocos para hacer el agosto ellos y sus amiguetes.

Los cuervos propios e internacionales, siempre al acecho, aguardan pacientemente a que el edificio se derrumbe para comprar solar y escombros a precio de saldo.

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