La entrada del día siete del presente mes, titulada " Cierre de RTVV", terminaba con: "No hay que desperdiciar el tiempo en reproches, pues hay para repartir a trote y moche, a diestra y siniestra; sino utilizarlo en aunar esfuerzos para buscar, en último intento, una solución viable. Alguna debe de haber si media la buena voluntad por parte de todos, aunque siempre quedarán inocentes caídos en el camino."
Coletilla final referida al deseable entendimiento para que la radiotelevisión valenciana no cerrara como consecuencia de la anulación judicial del ERE efectuado en ella. Vana aspiración. Ayer, las Cortes autonómicas, con los solos votos del PP, autorizaron al Gobierno de Generalidad Valenciana para que pueda llevar a cabo la extinción, disolución y liquidación del ente radio-televisivo.
Lo cierto es que, a partir de hoy, se puede efectuar la desconexión definitiva en cualquier momento. Será la única Comunidad Autónoma, la del antiguo Reino de Valencia, con secular y genuina lengua propia- en este caso, el valenciano - reconocida en su Estatuto como cooficial con el castellano o español- la que no tenga una radio-televisión pública que hable en su idioma autóctono y dé a conocer la cultura, historia, tradiciones, costumbres, pueblos y demás singularidades que la conforman.
El caso es que, aparte del perjuicio a los trabajadores del ente e indirectamente a otros, se ha dañado al pueblo valenciano. Se han herido sentimientos ( oportuna y hábilmente explotados y manipulados por las izquierdas, todo hay que decirlo) al no haberse alcanzado un acuerdo razonable, si es que hubo voluntad de conseguirlo.
El sangrar de los sentimientos produce salpicaduras incontrolables. Algunas pueden devenir en harakiri.
Canal 9 no ha contribuido prácticamente nada a potenciar al pueblo valenciano. Lo suyo era el catalanismo y lo colaban en cuanto podía, en lo que colaboraban muchos de los periodistas que ahora salen a reivindicar la televisión valenciana; en catalán, claro.
ResponderEliminarPor supuesto que hay muchos inocentes que van a sufrir las consecuencias; pero como en aquellas otras empresas en las que priman los intereses partidistas y sindicales sobre los de los trabajadores.
El Gobierno valenciano no pensó en principio cerrar RTVV, sino que continuara con costes mucho más reducidos, y por eso hizo el ERE.
ResponderEliminarLos sindicatos no se conformaron con el ERE, lo recurrieron y los jueces lo anularon. De no haber recurrido, se hubiera salvado la radio televisión valenciana.
Periodistas que ahora denuncian que se practicaba censura, antes del ERE callaban, demostrando que les importaba más el sueldo que la ética profesional.
Canal 9 ha empleado a muchos izquierdistas y catalanistas, lo que demuestra el no sectarismo de los gobiernos populares en Valencia a la hora de contratar, bastante ingenuidad y algo de "meninfotismo" por parte de algunos cargos hacia lo valenciano.
Sobre las 12,30 h. de hoy se ha producido el apagón, el fundido en negro. Si no prosperan antes los recursos anunciados, volverá a abrirse cuando los socialistas, según han dicho, solos o en coalición de izquierdas vuelvan a gobernar en la Comunidad. Cuando así ocurra, colocarán a los suyos y entonces se verà lo que es sectarismo y la mayor penetración catalanista en el medio público valenciano.