Como era previsible y no deseable, a medida que se acerca la visita del Papa a Madrid para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud, se arrecian las descerebradas reacciones en contra. No surgen espontáneamente, por si solas, tienen sus muñidores, directores de la changa hostil contra todo lo católico, que bien saben poner partitura a interpretar por las huestes de la algarada permanente nihilista. Tropa del odio destructivo, carnaval del mal gusto y la incivilidad, con licencia para manchar y zaherir lanzando sus personales inmundicias y miserias contra la juvenil peregrinación del rezo y por la paz.
Se ensañan con la dulce figura papal, pozo de sabiduría, corazón sufriente ante las injusticias del mundo, ojos de ternura, guardián de las enseñanzas de Jesús sintetizadas en el Amor y el Perdón, de la Doctrina de la Iglesia, y ferviente propagador del mensaje de su inmediato predecesor Juan Pablo II (“No tengáis miedo, abrid las puertas a Cristo”). Si quienes así proceden creen sentirse decisivos protagonistas de “ algo”, tristemente nada son de por sí; sólo polichinelas humanas teledirigidas por el Mal, enraizado con especial virulencia en la sociedad española por belcebúes de carne y hueso.
Benedicto XVI nos dice que por ellos también hay que rezar para que vean la luz, que el amor de Dios a nadie falta, tan solo son un campo invadido por la cizaña que hay que arrancar para que brote la buena semilla sembrada desde el amor del Crucificado. Este es el Papa, fijación obsesiva de los beligerantes laicistas por ser el representante de Jesús Cristo en la Tierra, quien participará como máximo líder espiritual en la JMJ dentro de pocos días.
Jornada Mundial de la Juventud que diversos grupos polichinelas quieren contra programar con distintas acciones. A tal propósito responde el llamamiento de” Cuerpos Feministas Laicos” a romper carteles, con fotografías del Papa y la leyenda impresa “pártele la cara”, en los accesos a iglesias y templos, y la manifestación "antipapa" prevista para el diecisiete de Agosto.
Alguna "sorpresa" más cabe esperar.Con el río de España revuelto hasta el máximo riesgo de desbordarse, hay quienes tienen preparadas cañas y anzuelos para pescar lo que sea cara a las próximas elecciones. Se creen con patente de corso y con ellos no va lo de respetar la veda. A estas alturas todos nos conocemos, porque “ aunque el mono se vista de seda, mono se queda”. Los escépticos y desmemoriados que tiren de hemeroteca.
Lo mínimo que debería prevalecer es el máximo respeto a los millones de católicos que hay en España y su derecho a congregarse, es una simple cuestión de coherencia. De todas formas a mi entender, detrás de estos grupos de burla hay una mano oscura que los manipula a su interés político. Aunque la mona se vista de seda, Rubalcaba se queda.....
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