Santísimo Cristo del Monte Calvario,
esta mañana has salido de tu ermita,
y a hombros te han bajado al pueblo,
Alcudia de Crespins.
Ahora te estarán procesionando
en tu localidad. Repetidos vítores
en tu honor se gritarán.
Al atardecer del próximo domingo,
volverás a la bonita ermita,
santuario alcudiense de devoción.
Erizan la piel, palpita el corazón
y saltan emotivas lágrimas
al cantar: “ Viva nuestro Cristo,
el Rey de nuestro pueblo,....”
y “ Por mí crucificado, os miro
en ese madero; sanad Cristo
verdadero, mi dolencia y mi
pecado...”
Son las fiestas principales del
pueblo.
Los que, por diversos motivos,
no podemos participar en ellas,
las añoramos, nos acogemos
a la benevolencia del Cristo del Monte
Calvario,
le cantamos y decimos “¡ Vitol !”
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