martes, 11 de agosto de 2020

FRAY JUNIPERO SERRA Y LA VISITA REAL A PETRA

  

 
 
 
 
 
 
Como es sabido, varias estatuas del franciscano mallorquín Fray Junípero Serra, beatificado por Juan Pablo II y santificado por el actual Papa Francisco, han sido derribadas en EEUU, así como las de otras figuras históricas que tuvieron un papel esencial en el descubrimiento y colonización del “ Nuevo Mundo “ : el genovés Cristobal Colón y los extremeños Pizarro y Hernán Cortés entre otros.
Toda esta furia iconoclasta no se trata de un auténtico revisionismo histórico, sino la ejecución descabellada de un plan plagado de odio, ignorancia y revancha.
 
Respecto a Fray Junípero Serra, nacido en Petra( Mallorca ) en 1713 y fallecido en 1784 en Monterrey ( California ), embarcó desde España rumbo a Méjico, conocido entonces como La Nueva España, para evangelizar a los nativos, proponiéndose también instruirles en la lectura, escritura y cómo conseguir el sustento con la labranza del campo y la dedicación a la ganadería, consiguiéndolo con los que aceptaron tales enseñanzas. Después de varios años se trasladó a California, acompañado por otros franciscanos, para sustituir allí a los jesuitas expulsados de las Indias españolas. El santo franciscano amplió el número de las misiones existentes, creando nueve más, en las que igualmente levantaron asentamientos y ciudades, que conservan su denominación en español, como es el caso de San Francisco, Los Ángeles, Monterrey, Sacramento, Santiago y muchas más. No fue el santo franciscano racista ni explotador, como calumnian sus detractores que desbarran con sus prejuicios antiespañoles y falsos victimismos.
Al contrario, Fray Junípero tuvo por guía predicar el Evangelio a los indios, culturizarles y protegerles, llevándolo a cabo con celo extremado.
 
Por todo lo expuesto, adquirió especial relevancia el desplazamiento que hizo ayer el Rey Felipe VI a Petra ( Mallorca), acompañado de su esposa, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, visitando la casa natal de Fray Junípero Serra, el museo y el convento, además del paseo por el pueblo. Fue un gesto simbólico y valioso el del Monarca, reconocedor y reivindicativo de la magna obra del santo franciscano. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario