¡ Adiós !, clase media española. Empezaste el despegue a finales de la década de 1950, llegando a ser la más extendida de Europa, y en los últimos años te han ido poco a poco esquilmando, hasta hacer que por falta de combustible, debido a los azotes de los vientos en contra, y con los motores averiados por la desidia de los mecánicos, iniciases el descenso planeando . Arrinconados, sobre el suelo del hangar, están los vestigios recogidos que dejaste en la pista de aterrizaje al estrellarte.
La tripulación era buena, esforzado el pasaje y el plan de vuelo diseñado con precisión; pero los controladores, ebrios de poder y enfrentados entre ellos, te fueron desviando de ruta mientras atendían sólo sus cuitas, sin prestar oídos a tus premonitorios avisos y llamadas de auxilio. Por no socorrerte, ni tan siquiera movilizaron los servicios de emergencia cuando intentaste, a la desesperada, tomar tierra envuelta por el negro humo que despedías y las llamaradas que fundían el fuselaje.
No se rasgaron vestiduras por tu muerte, ni hubo el funeral de honor que merecías. Tampoco asunción de responsabilidades; dijeron que, al fin y al cabo, fue un accidente. No renacerás como la mitológica ave fénix, de plumaje rojo y amarillo que, tras ser consumida por el fuego, volvía a tener vida cada quinientos años. Te fuiste para siempre, sacrificada y laboriosa clase media. Sólo se escuchan los lamentos del pueblo y sus cantos de odas en tu memoria.
Yo creo que la clase media no se ha ido para siempre,aunque me gusta el artículoNo creo que la gente termine aguantando a la casta política actual,y se verá en las próximas elecciones.Hay más alternativas que la actual,que va a terminar con todas las clases menos con los feudales si sigue así.Es lo que tiene pensar sólo en el dinero y en la diversión y no en las personas.Que me expliquen por qué hay cantidades millonarias para fichar un futbolista mientras millones de personas no pueden llegar a fin de mes.
ResponderEliminarLa clase media, como El Ave Fenix, con el tiempo renacerá de sus cenizas, aunque jamás con la pujanza que tuvo y los colores de la bandera de España en sus alas estarán deslucidos.
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