Como es sabido, el 2 de Mayo de 1.808 el pueblo de Madrid se levantó, armado con palos, garrotes, hoces, cuchillos… contra la invasoras tropas napoleónicas, iniciándose con ello la guerra de la Independencia que duraría hasta 1.814. Al día siguiente, 3 de Mayo, soldados de Napoleón, en represalia por el levantamiento, fusilaron a varios de los alzados. Dramáticas escenas que con descarnado realismo plasmó en lienzo y grabado D. Francisco de Goya y Lucientes.
En 1.866 el poeta jienense, Bernardo López García, publicó la famosa “Oda al 2 de Mayo”.En recuerdo a la efeméride iniciada por el pueblo madrileño, que hoy se conmemora, y que se extendió por el resto de España, se incluye el vídeo “ A los Héroes del 2 de Mayo de 1.808”, disponible en la red, en el que las imágenes van acompañadas por el recital lírico de dicha oda y los acordes musicales de “ El sitio de Zaragoza”.
A continuación del vídeo figura el texto de la oda.
ODA AL DOS DE MAYO
Bernardo LÓPEZ GARCÍA
Oigo, patria, tu aflicción,
y escucho el triste concierto
que forman tocando a muerto,
la campana y el cañón;
sobre tu invicto pendón
miro flotantes crespones,
y oigo alzarse a otras regiones
en estrofas funerarias,
de la iglesia las plegarias,
y del arte las canciones.
Lloras, porque te insultaron
los que su amor te ofrecieron...
¡a ti, a quien siempre temieron
porque tu gloria admiraron:
a ti, por quien se inclinaron
los mundos de zona a zona;
a ti, soberbia matrona
que libre de extraño yugo,
no has tenido más verdugo
que el peso de tu corona...!
Do quiera la mente mía
sus alas rápidas lleva,
allí un sepulcro se eleva
cantando tu valentía;
desde la cumbre bravía
que el sol indio tornasola,
hasta el África , que inmola
sus hijos en torpe guerra,
¡no hay un puñado de tierra
sin una tumba española!...
Tembló el orbe a tus legiones,
y de la espantada esfera
sujetaron la carrera
las garras de tus leones;
nadie humilló tus pendones
ni te arrancó la victoria;
pues de tu gigante gloria
no cabe el rayo fecundo,
ni en los ámbitos del mundo,
ni en el libro de la historia.
Siempre en lucha desigual
cantan tu invicta arrogancia,
Sagunto, Cádiz, Numancia,
Zaragoza y San marcial;
en tu suelo virginal
no arraigan extraños fueros;
porque indómitos y fieros,
saben hacer tus vasallos,
frenos para sus caballos
con los cetros extranjeros...
Y aun hubo en la tierra un hombre,
que osó profanar tu manto...
¡Espacio falta a mi canto
para maldecir su nombre!...
Sin que el recuerdo me asombre
con ansia abriré la historia;
presta luz a mi memoria,
y el mundo y la patria a coro,
oirán el himno sonoro
de tus recuerdos de gloria.
Aquel genio de ambición
que en su delirio profundo
captando guerra, hizo al mundo
sepulcro de su nación,
hirió al ibero león
ansiando a España regir;
y no llegó a percibir,
ebrio de orgullo y poder,
que no puede esclavo ser,
pueblo que sabe morir.
¡Guerra! clamó ante el altar
el sacerdote con ira;
¡guerra! repitió la lira
con indómito cantar:
¡guerra! gritó al despertar
el pueblo que al mundo aterra;
y cuando en hispana tierra
pasos extraños se oyeron,
hasta las tumbas se abrieron
gritando: ¡Venganza y guerra!...
La virgen con patrio ardor
ansiosa salta del lecho;
el niño bebe en su pecho
odio a muerte al invasor;
la madre mata su amor,
y cuando calmado está
grita al hijo que se va:
"¡Pues que la patria lo quiere,
lánzate al combate, y muere:
tu madre te vengará!..."
Y suenan patrias canciones
cantando santos deberes;
y van roncas las mujeres
empujando los cañones;
al pie de libres pendones
el grito de patria zumba
y el rudo cañón retumba,
y el vil invasor se aterra,
y al suelo le falta tierra
para cubrir tanta tumba!...
Mártires de la lealtad
que del honor al arrullo
fuisteis de la patria orgullo
y honra de la humanidad...
en la tumba descansad,
que el valiente pueblo ibero
jura con rostro altanero
que hasta que España sucumba,
no pisará vuestra tumba
la planta del extranjero
Tengo que reconocer que han brotado de mis mejillas lágrimas por la emoción del artículo, pero sobre todo al visualizar el video y escuchar de fondo la oda a los héroes del 2 de Mayo. Tal vez sean mis palabras las de un romántico y viejo guerrero que se niega a que España y lo que significa, quede anulada, arrasada, aniquilada. Patriótica oda, por algunos olvidada y desconocida hoy en día por la mayoría, cuyo canto ha hecho que mi sangre recupere fuerza, energía y se avive el espíritu combativo.
ResponderEliminar